Educación: el desafío de reinventarse y los nuevos retos

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Durante siglos el concepto del aula como lugar principal de enseñanza se ha mantenido prácticamente inalterado. Pero la pandemia, como a todo, vino a romper, por necesidad, los modelos tradicionales, entre ellos los de la educación. A lo largo de todo 2020 las aulas estuvieron vacías. Pero gracias a la tecnología la enseñanza siguió su curso con nuevos modelos virtuales, con clases vía Zoom, y tareas y exámenes en modo digital. Ahora, a medida que el mundo intenta transitar el camino hacia la nueva normalidad, las instituciones educativas reacomodan sus métodos combinando la virtualidad con el retorno de los alumnos a la presencialidad.

La pandemia obligó a las universidades a reconvertirse aceleradamente, abrazando la tecnología para continuar con su actividad y que los alumnos no pierdan tiempo de estudio. Se utilizaron estrategias como aulas virtuales, plataformas web de interacción entre docentes y alumnos, y comunicación vía herramientas digitales y redes sociales. Sin embargo, la nueva etapa se perfila, al menos por ahora, en un modelo mixto de semipresencialidad, combinando el online con la asistencia a los salones. Una reconversión obligada que plantea aún desafíos hacia adelante hasta que la crisis quede en el pasado.

“El uso de aulas híbridas permite que cada estudiante ejerza la libertad de decidir, mientras perdure la emergencia sanitaria, si desea cursar en forma presencial o virtual, en función de su contexto personal y el de sus familias”, expresa Cynthia Wilner, Secretaria Académica de UCEMA, que durante las últimas semanas abrió la inscripción a la modalidad de cursada y los estudiantes ya seleccionaron la forma en la que cursará las materias: híbrida o 100% virtual.

¿Qué carreras se imponen?

Hoy más que nunca, dado a los cambios en el mercado laboral, están surgiendo nuevas profesiones que dejarán a otras en el camino. Sin embargo, muchas de las tradicionales están tan o más en auge como antes.

Las carreras vinculadas a la salud y al cuidado de los mayores, dado el aumento en la expectativa de vida, son elegidas y demandadas. Y si bien este año se destacaron las carreras clásicas: medicina, abogacía, odontología, administración de empresas, ingeniería civil e industrial, relaciones internacionales; para 2022 se imponen otras más digitales, como ingeniería en informática y licenciatura en Comunicación Digital e Interactiva, entre otras. O carreras relacionadas con el desarrollo y fabricación de vacunas, como biotecnología, biología, ingeniería.

A su vez, también se perfilan carreras vinculadas a medio ambiente y a energías renovables, al turismo, y por supuesto a la tecnología y a los negocios digitales. Por caso, no es novedad la necesidad de personal en el sector del software, donde cada año quedan no menos de 5.000 puestos de trabajo sin cubrir.

Ambito


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