Día de la Educación Técnica: Pensar en un desarrollo industrial, agroindustrial y con empleo de calidad

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Cada 15 de noviembre conmemoramos el Día de la Educación Técnica, por la creación, en 1959, del Consejo Nacional de Educación Técnica (CONET).

Este organismo, que rige la enseñanza de distintas especialidades tecnológicas y científicas en numerosas escuelas de nuestro país, actualmente es llamado Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET) el cual nace con la Ley Federal de Educación (que luego fue derogada). Primero en 2005 se promulga la Ley 26.058 de Educación Técnico Profesional y después en 2006 la Ley de Educación Nacional Nº 26.206, concretándose en nuestra Provincia en el 2015 con la Ley de Educación de la Provincia de San Juan Nº 1327-H. Logro de todos los docentes Argentinos y de San Juan

Pero a la vez es un muy buen momento para analizar un poco la historia, el presente y los desafíos a futuro para la educación técnica y agrotécnica en nuestro país.

La Educación Técnica en la Argentina tiene una historia muy larga desde la época de la  colonia en adelante. Se plasma en la creación de la primera escuela técnica nacional  Otto Krause, también conocida por su primer nombre Escuela Industrial de la Nación, que nace a partir de un colegio comercial. Recordemos que la ideología de los gobernantes de ese momento, fines del Siglo IXX principio del Siglo XX, no era que Argentina fuera un país Industrial y Agroindustrial sino solamente agrícola y todo lo demás mucho no importaba. No obstante, había gente que pensaba que el país tenía un futuro industrial importante por las características de la Argentina su  riqueza y la pujanza del  nuestra población.

A partir de la creación de esta primera Escuela Técnica empiezan a surgir otro tipo de escuelas para formar en oficio teniendo  un desarrollo importante en el gobierno de Hipólito Irigoyen donde empiezan a aparecer las escuelas de arte y oficios. Recordemos que en ese momento está el desarrollo del petróleo en la Argentina con el General Mosconi entonces necesitábamos gente experta, por lo que venían personas de otros países, esa gente instruía a los habitantes de nuestro país. Además, estaban las corrientes migratorias de todos los países del mundo y mucha gente acostumbrada a trabajar en fábricas, por lo que se empiezan a desarrollar estas escuelas de arte y oficio, que se van a regularizar a fines de la década del 50´ con la creación del Consejo Nacional de Educación Técnica, con el Estatuto del año 58´ donde contempla a las escuelas técnicas y nuestro gremio que nace en el año 54´. AMET nace como un sindicato de maestros de enseñanza prácticas (MEP), después se generaliza y tiene un alcance a todos los docentes.

Nuestro gremio nace con la educación técnica que se concreta en estos años, primero con el estatuto docente que marca quienes son los que tienen que conducir las escuelas y dar clases en ellas, más la creación del Consejo Nacional de Educación Técnica. Esto tiene un gran empuje y aparecen diferentes escuelas en todas partes del país con diferentes modalidades. Fundamentalmente la formación del técnico era desde el primer año, es decir que chicos de 12 o 13 años se comenzaban a formar como técnicos a la par de las escuelas secundarias, que son una novedad en ese tiempo en el mundo porque brindaba la posibilidad de ingresar a la universidades.

Ya estaban las escuelas de Arte y Oficio que comienzan a denominarse escuelas de Formación Profesional y Monotécnicas, eran famosas porque iban de pueblo en pueblo y formaban oficios específicamente para los adolescentes. El criterio era que aprendieran de jóvenes para que a la mayoría de edad puedan acceder al campo laboral. Esta es la idea que tenemos nosotros ahora, que el chico pueda aprender un oficio, que le guste por supuesto, que le sirva para que cuando termine la secundaria, pueda optar por ir a la universidad o desempeñarse en el campo laboral con los aprendizajes adquiridos, el objetivo de las escuelas técnicas en toda su amplitud.

En el mismo sentido se encuentran las escuelas de Formación Profesional que tienen especialistas o profesionales en cada una de las áreas para enseñar los oficios a los jóvenes, adolescentes o adultos. Estas son similares a las escuelas de Capacitación Laboral la diferencia es que en las de Formación Profesional los oficios se forman en un tiempo más corto.

Con el devenir del tiempo, las malas políticas y los ineficaces gobernantes empiezan a querer hacer desaparecer las escuelas técnicas, tal es así que en la década del 90´ con el gobierno de Carlos Menen desaparece el Consejo Nacional de Educación Técnica, todas las escuelas secundarias y las escuelas técnicas, se transfiere a cada una de las provincias. Nosotros desde AMET no nos detuvimos en nuestra lucha que fue en los primeros años del 90´ por lo que logramos que se mantenga Instituto Nacional de Educación Técnica – INET. Concretándose con la Ley 26.058 de Educación Técnica, con esto logramos avanzar para seguir formando técnicos.

Si uno analiza las políticas de muchos años, específicamente de la última dictadura militar en Argentina, ellos destruyen toda la industria nacional, abren las importaciones pero no para generar una competencia leal con la industria nacional sino en forma desigual y se comienza a perder la industria del país. Esto se puede ver en San Juan, teníamos molinos, fábricas de gaseosas, cervezas, Talleres que fundían metales, es más la escuela Boero y la Industrial Sarmiento tenían hornos para fundir metales, todo esto se pierde a causa de políticas que no quieren que el país se desarrolle industrialmente y agroindustrialmente, dejar un país que  solo exporta materia prima y no el producto  con valor agregado.

Tenemos la necesidad de apostar más a la educación técnica para lograr que los chicos que no quieran o no puedan acceder a la universidad puedan tener la posibilidad de ingresar al mundo laboral en forma inmediata.

Quienes gobiernan a la Nación y a la provincia deben concretar políticas que conduzcan al desarrollo industrial y agroindustrial y nuevas tecnologías lo cual nos llevará a desarrollar fuentes de trabajo.

Por eso hay que cambiar la mirada política y pensar que el desarrollo de un país se basa en el desarrollo científico, tecnológico y la creación de fuentes de trabajo que pasa por el desarrollo industrial, es decir favorecer a las empresas argentinas para generar mayor empleo. Las políticas deben acompañar el desarrollo de la educación técnica y de esta manera generar fuentes laborales reales y de calidad.

Felicito a los directivos, a los docentes y alumnos de las escuelas técnicas, vemos el importante desarrollo de conocimiento que hacen en las aulas, ellos practican, construyen e innovan. Hay mucha creatividad en nuestras escuelas sanjuaninas, hay estudiantes con gran potencial y nosotros tenemos que darle la posibilidad de profundizar esos conocimientos y celebrar el trabajo de los docentes.

Mis saludos a todos los colegas, yo amo la Educación Técnica, Agrotécnica, Monotécnica, Formación Profesional, Capacitación Laboral, esta educación nos da una posibilidad enorme para crecer.

¡Feliz Día de la Educación Técnica!

Daniel Quiroga

Secretario General de AMET Regional X San Juan


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