El célebre ‘Teorema de Baglini’, que sostenía que las declaraciones de un político serán más disparatadas o irresponsables cuanto más lejos esté del poder, encuentra en el libertario Javier Milei a una de sus excepciones. Es cierto que aquella afirmación del diputado radical, hecha en 1986 en un marco en que se debatía justamente la deuda eterna, ha ido mutando con los años, pero debe admitirse que eso de que «más cerca del poder los candidatos se volverán más sensatos y razonables», no tiene justamente en el líder de La Libertad Avanza a uno de sus cultores. Porque las encuestas muestran a Milei cada vez más cerca de poder llegar al poder, pero sus afirmaciones crecen en virulencia y en las últimas horas dijo que en su hipotético gobierno «la educación dejará de ser gratuita y obligatoria», negando además que «se trate de un derecho».
Cuando le preguntaron entonces que haría «el que quiera estudiar, habló de un «sistema de vouchers», que no quedó claro en que consistiría, aunque si dejó perfectamente en claro en que terminaría con «la educación obligatoria, porque funciona pésimo».
«El sistema de la obligación no funciona», agregó Milei, contando que «si querés estudiar, vas a tener un voucher y vas a poder estudiar, cambia el sistema, el tema de la obligatoriedad es querer controlar a los seres humanos e imponer tu patrón moral. El que quiera estudiar, estudia, pero obligar no me gusta».
«¿El sistema como está ahora funciona bien? El 60% de los chicos de 10 años no lee ni entiende un texto y en Matemática estamos peor. En las pruebas PISA estamos pésimo y nos echaron por fraguar la muestra. Aún así dio mal», sostuvo.
Asimismo, el funcionario añadió: «La educación es un desastre y el país un baño de sangre. Hay un Estado fallido que todo lo que hace lo hace mal. Las instituciones tiene que competir y ser buenas. Vas a tener educación pública y educación privada. La diferencia es que no vas a ser rehén del adoctrinamiento del estado».
En esta misma línea, el economista liberal apuntó a presunta gratuidad de la educación en Argentina, señalando que «gratis no hay nada, alguien lo paga, lo hacés al pagar los impuestos, porque no existe el gratis, siempre alguien paga».
Como se sabe, el economista ya había generado otra polémica hablando de dolarización de la economía, admitiendo que si bien «las condiciones del entorno no son menores», cree que «si viene una hiperinflación, la ‘casta’ vendrá de rodillas a pedir que dolarice».
«El escenario difícil es que plantan la bomba un minuto antes de irse. Mi primera alternativa es llevarlo al Congreso. Puede ser que lo rechacen. No iría por un referendum vinculante sino por consulta popular. Si lo rechazan, acelero el recorte del gasto público«, manifestó el diputado liberal.
A su vez, reiteró que «es muy importante bajar rápido la inflación», pero que «querer recrear una moneda es más costoso y más riesgoso». «En la Convertibilidad, el Banco Central era independiente y tenía reglas duras. Ese peso tenia demanda de dinero. Esa regla era exitosa y ganaba elecciones. Cuando el fisco se quedó sin plata, rompió la regla», afirmó.
Además, advirtió nuevamente que «las chances de una hiperinflación son enormes» y señaló: «Lo mejor es hacer reformas que sean irreversibles. Lo resuelvo de una manera u de la otra, pero lo resuelvo. El primer argumento para eliminar el Banco Central es moral. ¿Robar está bien?»
«Si llego a ser Presidente, el mandato es claro. Baja la inflación o te pongo un voleo. Mi compromiso es bajar la inflación y la voy a bajar a garrotazos. Con la dolarización es más rápido. Sino, meto un ajustazo en el sector público que me va a absorber los pesos», aseguró el economista liberal, al que varias encuestas ya ven con chances concretas de poder aspirar a llegar al ballotage.
Repudio de dirigentes políticos y sociales
Tras esas polémicas declaraciones de Milei sobre educación, varios dirigentes políticos y sociales salieron en las últimas horas a repudiar su propuesta de los vouchers, advirtiendo que «el único objetivo de Milei es sacarle derechos a los que menos tienen».
A su vez, también se sumaron al repudio especialistas en educación y personalidades reconocidas en el ámbito de la actividad pedagógica, quienes remarcaron que el derecho a «enseñar y aprender» está amparado por el artículo 14 de la Carta Magna.
«Creemos que la educación es un derecho y como tal requiere financiamiento del Estado. Desde 1884, la Constitución plantea que la educación primaria es gratuita y obligatoria. Milei cree en la educación como un mercado«, declaró al respecto el ministro de Educación, Jaime Perczyk, en diálogo con Télam.
En este sentido, el funcionario señaló que la propuesta de Milei es una postura «anti-derechos» y advirtió que la mencionada propuesta de «vouchers» fue un sistema que se implementó en Chile durante la dictadura de Augusto Pinochet.
«Son concepciones anti-derechos que destruyen las políticas públicas y generan desigualdad», insistió el titular de la cartera de Educación y aseguró que desde el Frente de Todos «continuarán defendiendo la educación pública para mejorarla».
Asimismo, el ministro de Educación de la provincia de Buenos Aires, Alberto Sileoni, también cuestionó los dichos y propuestas del economista liberal, a quien acusó de querer «sacarle los derechos a los que menos tienen», al mismo tiempo que indicó que «es falso que hay un abandono de la escuela».
«De más está decir que no estamos de acuerdo. El articulo 2 de la Ley de Educación Nacional dice que la educación es un bien personal y social garantizado por el Estado. Todas estas medidas tienen como principal objetivo sacarle los derechos a los que menos tienen«, manifestó el ministro también en diálogo con Télam.
En este sentido, sostuvo que «las clases no pobres ya privatizaron la educación y la salud, no precisan al Estado» y negó que se haya generado un «abandono de la escuela» como el que mencionó Milei, por lo que calificó sus declaraciones como «falsas» y afirmó que «hoy van a la escuela casi el 98% de los niños a partir de los cinco años».
«Lo que propone Milei es un sistema de exclusiones de los sectores populares», agregó por su parte Sonia Alesso, Secretaria General de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina.
En este sentido, la gremialista advirtió que el precandidato a Presidente liberal buscar establecer una privatización indirecta de la educación para que esta funcione en base al «financiamiento externo del Banco Mundial, empresarios y fundaciones externas». «La obligatoriedad de la primaria y secundaria tiene que ver con otorgar derechos», subrayó.
Por su parte, desde Juntos por el Cambio, la diputada por CABA Victoria Morales Gorleri decidió cruzarlo también con dureza: «La obligatoriedad educativa no es un arma que se le pone en la cabeza a la sociedad, sino un estímulo indispensable para la supervivencia. Me preocupa siempre la mirada violenta de las cosas que tiene Milei, y sus metáforas bélicas».
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