La investigación tiene por objetivo caracterizar las harinas y los subproductos obtenidos de diferentes áreas agroecológicas de la provincia de San Juan con el fin de determinar la calidad de las mismas, tendiendo a minimizar la aplicación de agroquímicos y optimizando el uso del agua.
La Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación financió la investigación con un monto de 400 mil pesos. En el transcurso de estos seis meses iniciales de investigación, se organizaron los ocho equipos de trabajo conformados por más de 40 agentes de INTA San Juan e IPAF Cuyo, además de numerosos agentes de otras instituciones colaboradoras (UNSJ, Conicet, municipios, fincas y empresas privadas). Se establecieron los mecanismos para la ejecución presupuestaria y se llevaron adelante las tareas necesarias para la puesta en marcha de las actividades correspondientes a los distintos proyectos.
A pesar de que el contexto sanitario actual ha sido una dificultad para el normal desarrollo de las tareas, los ocho proyectos iniciaron sus actividades de investigación, vinculación y comunicación sin mayores imprevistos. La directora del proyecto es Mónica Ruiz y el equipo de trabajo está integrado además por Teresa Fernández, María Fernanda Mujica, Mariana Balmaceda, Cibeles Contreras, Eric Rojas, Mario Jofré, Eduardo Soria, Lucas Guillen, Georgina Lemole, Sandra Paez y Eduardo Soria.
El objetivo es que toda la cadena productiva, desde el cultivo hasta la elaboración de la harina o hasta las pastas secas, quede dentro de la provincia. Esto va a dar por un lado la ventaja de que los productores tengan esta opción de tener este cultivo, de que todo lo que van a obtener ya va a estar vendido porque los molinos tienen una alta capacidad de molienda.
Por otro lado, para los productores esto podría significar una disminución en los costos de traslado y por qué no, un aumento en la calidad de la harina. Esto les podría permitir hacer algunas mezclas, obtener harinas de mediana calidad, entre otros.