La catástrofe humanitaria que ha atravesado América Latina y el Caribe por la pandemia ha profundizado los enormes déficits sociales que ya arrastraba la región, dejando al mundo entero al borde del colapso económico, social y educativo. En ese contexto, las políticas de redistribución social son fundamentales para promover una sociedad más equitativa. Y la educación es el motor esencial para alentar las trasformaciones sociales más profundas.
Según datos proporcionados por el Banco Interamericano de Desarrollo el 1% de la población más rica obtiene el 21% de los ingresos de toda la economía, esto es el doble de la media del mundo industrializado. Los números son elocuentes y reflejan una profunda desigualdad en términos alimenticios, educativos y sanitarios. A la vez, un reciente relevo de la CEPAL demuestra que la pandemia ha llevado la pobreza al punto más alto en nuestra región, hay cerca de 209 millones de pobres de los cuales 78 millones están en situación extrema.
La pobreza está íntimamente vinculada a un acceso desigual de la educación, algo que se replica en las generaciones futuras.
El derecho a la educación no sólo garantiza el acceso al conocimiento, sino también a empleos mejor remunerados y una calidad de vida superior.
En esta coyuntura, los recursos económicos del Estado para solucionar la crisis son fundamentales, es donde la justicia fiscal cumple un rol clave en la lucha contra la desigualdad. América Latina y el Caribe recauda mucho por impuestos al consumo, pero poco por impuestos a la riqueza.
Actualmente, perdemos 26 mil millones de dólares por año por no gravar a las grandes fortunas, menciona un informe de Latindadd, RJFALC y Fundación SES. El rol central de los Estados implica garantizar una política de redistribución, para que aquellos que tienen mayor cantidad de recursos paguen proporcionalmente más que quienes se encuentran en profunda desigualdad, acentuada aún más luego de la crisis sanitaria.
Asimismo, la salida de recursos de nuestros países producto de la evasión fiscal, impide el desarrollo de políticas públicas inclusivas. América Latina pierde cerca de 340 mil millones de dólares anuales por evasión de impuestos, de acuerdo a los datos de la CEPAL, esta cifra que representa el doble de lo que la región invierte en educación.
Este será uno de los ejes que debatirá el próximo Congreso Regional Experiencias Educativas 2021 que se realizará 17, 18 y 19 de noviembre de 2021, señalado por sus organizadores como «un ámbito de encuentro entre educadores, decisores políticos y equipos técnicos de los ministerios de Educación de la región, juventudes, referentes de organizaciones sociales y de organismos internacionales, que buscará impulsar políticas públicas que permitan superar las profundas desigualdades que atraviesa la región en términos educativos».
Según Marcela Browne, responsable de Educación en Fundación SES y Coordinadora del Congreso Regional Experiencias Educativas: «La Pandemia demostró que la escuela, como institución viva, es un pequeño mundo sujeto a las tensiones entre el cambio y la permanencia. Donde proliferaron nuevas intervenciones y recursos pedagógicos, en un contexto de creciente desigualdad educativa producto de un disímil acceso a los medios necesarios».
Entre los oradores y oradoras están: Germán Lodola, Secretario de Evaluación e Información Educativa del Ministerio de Educación de Argentina; Heleno Araujo, Presidente de la Confederación Nacional de los Trabajadores de la Educación-CNTE de Brasil; Ricardo Cuenca, exministro de Educación de Perú e Investigador del Instituto de Estudios Peruanos; Luis Scasso, Director – representante permanente ante el Gobierno Argentino en OEI; Dra. Martha Alexandra Agudelo Ruíz, Secretaria de Educación de Medellín; Marisa Graham, Defensora de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la Nación; Vernor Muñoz Villalobos, ex relator especial del derecho a la educación, Director del Departamento de Educación en Derechos Humanos del Ombudsman de Costa Rica y asesor de la CME; Gianny Rozo, Director de técnicas y tecnologías de la Secretaría de Medellín; Daniela Trucco, Oficial de Asuntos Sociales de la División de Desarrollo Social de la CEPAL; Cora Steinberg, especialista de educación de UNICEF Argentina; Tomas Hirsch, diputado de la República de Chile; Javier Sánchez, diputado a cargo de la comisión de educación en el Congreso español y de la secretaría de educación del PODEMOS (España); Dr. Pablo Gentili, Coordinador ELAG, exsecretario del Ministerio de Educación de la Argentina, Director de FLACSO Brasil; además de otros referentes educativos, políticos y sociales. Esta iniciativa es impulsada por la Fundación SES, junto a otras instituciones de América Latina y el Caribe, y también de Portugal, España y Andorra, estas son: Campaña Latinoamericana por el Derecho a la Educación (CLADE); Consejo de Educación Popular de América Latina y el Caribe (CEAAL); Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO); OMEP; Liga Iberoamericana de Organizaciones de la Sociedad Civil; REPEM; Centro Internacional de Investigaciones (CII-OVE); Red de Justicia Fiscal de América Latina y el Caribe, Programa SPORTIC Aprender con deporte y tecnología; Campaña Argentina por el Derecho a la Educación (CADE); Universidad Pedagógica Nacional (UNIPE); RED ENCUENTRO de Entidades No Gubernamentales para el Desarrollo; Universidad de Quilmes; Centro de Políticas Públicas en Educación, Comunicación y Tecnología y la participación del Ministerio de Educación de la Nación y el Observatorio del Derecho a la Educación. Y cuenta con el apoyo de: Escuela de Estudios Latinoamericanos y Globales (ELAG); UNESCO; Mecanismo de Participación de la Sociedad Civil de América Latina y El Caribe para el Desarrollo Sostenible (MeSCALC); Banco Interamericano de Desarrollo (BID); y UNICEF.
La participación en el Congreso es libre y gratuita, con previa inscripción: www.experiencias-edu2021.fundses.org.ar
Memo