Los maestros bonaerenses reclamaron al gobierno de Axel Kicillof que, a partir de ahora, el monitoreo y la revisión de los salarios se haga teniendo en cuenta la suba del rubro alimentos del Índice de Precios del Consumidor (IPC) que mide el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), por entender que es el rubro que más impacto tiene el bolsillo docente.
En una nota elevada a la ministra de Trabajo bonaerense, Mara Ruiz Malec, los sindicatos que integran el Frente de Unidad Docente (FEB, SUTEBA, SADOP, AMET y UDOCBA) sostuvieron que los y las docentes «siguen perdiendo poder adquisitivo» y que, por esto, es necesario que las revisiones salariales se hagan teniendo en cuenta el rubro «Alimentos» del IPC.
«Consideramos que el piso mínimo de los aumentos salariales no debe ser inferior a lo que indique dicho índice», sostuvieron los gremios en un comunicado conjunto y aclararon que, si bien el acuerdo salarial se viene cumpliendo según lo pautado, «el índice de Precios de Consumo del INDEC no resulta ser el mejor indicador del poder de compra de nuestros/as representados/as».
En efecto, la inflación acumulada en los primeros cinco meses del año es del 29%, pero el rubro «alimentos y bebidas no alcohólicas» es el que mayor alza experimentó en estos cinco meses ya que trepó al 33,7%. Ese rubro es, a su vez, el de mayor incidencia en el índice general por la cantidad de productos que incluye. En la última medición, subió un 4,4% impulsado por el café, té, yerba y cacao (6,8%), carne (6,5%) y dulces (6%).
El gobierno y los gremios firmaron un primer acuerdo en febrero por 42%, que fue revisado en mayo y ampliado al 60% (con dos cuotas de 10% más en mayo y diciembre) debido a la suba de los precios. El entendimiento incluye una revisión salarial en el mes de septiembre. Ese monitoreo y eventual renegociación siempre se realiza en base al IPC, y eso es lo que buscan modificar ahora los representantes sindicales.
Hasta ahora, los docentes de la provincia cobraron un incremento total del 26% (16% en marzo y 10% en mayo), que quedó 3 puntos por debajo de la inflación acumulada hasta mayo, y a 7 puntos si se toma en cuenta sólo el rubro alimentos. En julio percibirán el tercer tramo del acuerdo que es del 10%, mientras que en septiembre cobrarán otro 14%. La última cuota será la de diciembre. El análisis de los gremios es que el acuerdo corre atrás de la inflación.
«El rubro que mayor inflación experimenta está constituido por los productos que más consumen los trabajadores, es decir los productos de la Canasta Básica. Este rubro registra una suba superior en nivel porcentual al índice general», advirtieron los sindicatos.
Por este motivo, consideraron que «es necesario corregir esta distorsión, dado que el salario docente continúa perdiendo poder adquisitivo a pesar de la intención expresada por el gobierno de lograr y mantener una recomposición real de los salarios».