La educación y la tecnología siempre se han complementado. Hace no muchos años comenzamos a ver cada vez más computadoras en las escuelas y con la pandemia las clases virtuales se han instalado en muchas universidades o centros de estudio. Si bien la educación presencial es irremplazable y mucho más fructífera que una clase virtual, la educación siempre incorporó la tecnología ya que ofrece recursos enriquecedores que pueden mejorar la experiencia del alumno.
Exponer un tema en un aula utilizando un Power Point y llevando videos de YouTube que sumen a la explicación les es de gran utilidad para los alumnos para retener mejor la información. El profesor que escribe todo un pizarrón y habla durante toda la clase quedó obsoleto.
¿Es el metaverso el futuro de la educación?
Todavía es difícil asegurar que el metaverso será el futuro de la educación. Pues fue apenas hace un año que Mark Zuckerberg anunció que está trabajando en el desarrollo del metaverso, cuando hizo el cambio de nombre de Facebook a Meta.
Los desarrolladores de este concepto de universo virtual aseguran que será el futuro de internet. Se trata de una experiencia multisensorial e inmersiva en una realidad virtual donde se podrá viajar a cualquier parte del mundo sin salir de nuestras casas, jugar al golf con alguien de otro continente y hasta asistir a una reunión de trabajo sin importar nuestro aspecto real ya que se verá el avatar virtual del usuario, por mencionar algunos pocos ejemplos.
Un punto importante en la presentación que realizó Mark Zuckerberg sobre el metaverso cuando anunció el cambio de nombre de su compañía fue la educación.
La pandemia cambió el mundo educativo, teniéndose que adaptarse a una nueva situación que fue posible gracias a la tecnología. Hoy nos encontramos en un momento en que la educación digital es tendencia. Pero además, podríamos estar en una transición hacia una educación con realidad virtual.
Los expertos que se han pronunciado al respecto esperan que el metaverso revolucione la educación. Por ejemplo, podríamos asistir a una clase desde la comodidad de nuestras casas y estar en una representación virtual del aula rodeado de los avatares virtuales de nuestros compañeros y el profesor, pero esto no le agregaría nada de valor a una explicación.
Por otro lado, si se usa la realidad virtual en las aulas se podrá ir al interior virtual de un cuerpo humano para estudiar su biología, ver el sistema solar para estudiar los planetas y los componentes del universo, visitar Egipto o hasta ir a una representación de la antigua Roma y recorrer sus calles para ver su modo de organización en sociedad. Estos pocos ejemplos plantean una revolución en la educación que cambiaría radicalmente el modo de aprender.
Es decir, además de poder visitar virtualmente cualquier lugar del mundo, también será posible viajar en el tiempo para comprender mejor la historia o hasta estar en frente de Saturno para estudiar sus anillos.
Otro de sus posibles usos puede ser para aprender un idioma de una manera más divertida, pudiendo hablar con alguien de otro país para que nos enseñe su idioma.
Estudiar con realidad virtual puede convertirse una experiencia inmersiva e interactiva nunca vista. La educación en el metaverso puede ofrecer recursos educativos de gran valor para que el estudiante aprenda de la mejor manera posible.
Sin embargo, pasarán muchos años o hasta décadas para ver si esto se hace realidad ya que los metaversos que existen actualmente son pruebas para mejorar la experiencia y poder desarrollar un metaverso donde todo lo que nombramos se haga realidad.
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