Las prácticas son una instancia decisiva en el aprendizaje y están orientadas al perfil profesional en el que se están formando los estudiantes. El objetivo es dotarlos de herramientas para enfrentar desafíos y problemáticas que pueden plantearse en la diversidad de situaciones socio-productivas en el ámbito laboral.
El Ministro de Educación Felipe De Los Ríos, encabezó el acto de firma de dos convenios para la realización de prácticas profesionalizantes: uno con la Federación de Viñateros y Productores Agropecuarios, representada por su presidente Eduardo Garcés, y el otro con la empresa de informática y comunicaciones SETEC, de Caucete, representada por su propietario Rolando Gabriel Cortez.
En la oportunidad, el presidente del sector que nuclea a los productores vitivinícolas y agropecuarios, Eduardo Garcés, puso en valor estas actividades que acercan a los estudiantes al sector laboral diciendo: ”Al país lo vamos a sacar adelante no abriendo grietas sino construyendo puentes, y me parece que esta es una buena forma de crear un puente duradero y útil para todos”.
Posteriormente el ministro De Los Ríos expresó: «Esta firma con la Federación de Viñateros de San Juan, es todo un logro del equipo que integra la Dirección de Educación Técnico Profesional, el Consejo Provincial Educación Trabajo y la delegación del INET. El objetivo es concretar lo que establecen las leyes de Educación Nacional y Educación Técnico Profesional, que es llevar a los alumnos al ámbito del sector productivo, no para que ocupen un puesto de trabajo, sino para que aprendan en un entorno de trabajo, con normas de seguridad, protocolos de procedimientos, con la lógica de producción. Todo esto se consigue estando en el lugar donde se originan estas acciones e interactuando el docente que esta a cargo del grupo de alumnos, con quien conduce el proceso productivo. Esta es la diferencia entre pasantía y práctica profesionalizante”.
El ministro, afirmó: ”Todo lo que tenga que ver con la tecnología asociada al sector productivo nos lleva de la mano a la producción del siglo XXI, primero pensar que las líneas de producción son líneas y que no deben ser permanentes en el tiempo. Una empresa innova sus productos cuando saturó el mercado. Ahí tiene que mejorar y cambiar la línea de producción de ese mercado, para satisfacer nuevos requerimientos comerciales y para eso el personal tiene que ser flexible, tiene que saber trabajar en equipo y tener un entrenamiento permanente, estas son las cosas que estamos propiciando desde el ministerio de Educación”.
“El problema que tenemos los argentinos es que no sabemos trabajar en equipo, y esa concepción es la que intentamos superar con este tipo de herramientas, y creemos que los jóvenes son los que pueden cambiar este paradigma. Los alumnos deben preparse no para ser empleados sino para generar empleo”, finalizó De Los Ríos.
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