El profesor Edgardo Doberstein, es uno de los misioneros finalistas del concurso nacional Docentes que Inspiran, organizado por Clarín, la Fundación Noble y Zurich. Representa a la Escuela Provincial de Educación Técnica N.º 18 de Puerto Esperanza y fue elegido entre más de 2.100 postulaciones recibidas en todo el país. La otra docente misionera en la final es Gabriela Büttner, del Instituto de Enseñanza Agropecuaria N.º 8 en Montecarlo (Colonia Guatambú).
Desde 2015, Doberstein lidera proyectos que vinculan la tecnología con la solidaridad e inclusión. Bajo su coordinación, estudiantes diseñaron y fabricaron prótesis mediante impresión 3D, dispositivos educativos en braille y un submarino de rescate. Entre sus iniciativas destaca “Mono Leo”, un recurso que facilita la enseñanza de lectura en braille.
Doberstein, actualmente tiene a su cargo 64 estudiantes. Sobre la emoción de alcanzar esta instancia, destacó que “para mí, llegar a la final es una enorme alegría y un reconocimiento que me emociona profundamente. En lo personal, es una caricia al alma y una confirmación de que el camino que elegí vale la pena”.
“Consideré contar y mostrar todos los proyectos en los que vengo trabajando hace varios años, todos con el objetivo de ayudar o asistir a algún sector de la sociedad que lo necesite”, explicó.

Doberstein en el rol de profesor
Respecto a su vínculo con los estudiantes, Doberstein agregó que “me gusta pensar que soy un profesor cercano, que escucha y que aprende junto a sus estudiantes. Trato de construir un vínculo de confianza, donde cada uno pueda expresarse, equivocarse, crear. Creo que la clave está en conectar desde lo humano, desde el respeto y la empatía. Cuando eso sucede, lo demás fluye”.
Además de enseñar, Doberstein se dedica a otra actividad laboral, sin embargo remarcó que es docente porque “amo enseñar”. En este sentido mencionó que “eso lo que hace resaltar a un maestro o maestra, considerar el trabajo como vocación y no simplemente por una ocupación laboral o fuente de ingreso”.
Visibilizar la entrega de los educadores misioneros
Sobre el impacto del reconocimiento en la educación misionera, aseguró que “es una oportunidad de mostrar todo lo valioso que se está haciendo en nuestros colegios, a veces con pocos recursos, pero con muchísima entrega, creatividad y compromiso”.
Asimismo puso en valor la tarea de sus colegas misioneros. “Creo que en la provincia hay muchos docentes que inspiran y pueden ser reconocidos. En estos premios no es que hay elegidos en cada una de las provincias, sino que son los que más se destacan en todo el país”.
A quienes se inician en la docencia les dejó el mensaje de que “no pierdan nunca el entusiasmo. Que se animen a ser ellos mismos en el aula, que escuchen a sus estudiantes y confíen en sus capacidades. La docencia no es fácil, pero es profundamente transformadora”.

Cómo sigue el camino hacia la final
En un mes aproximadamente, una productora nacional se acercará a la institución a realizar un audiovisual para reflejar su trabajo junto a testimonios de colegas y alumnos. Luego se proyectará en la última instancia junto a la de los demás y posteriormente un jurado elegirá un ganador, además de dos menciones especiales.
De cara a la gala final que se realizará en Buenos Aires, Edgardo subrayó que “estar entre los seis ya es el principal premio”.
Fuente: www.canal12misiones.com