En lo que va del gobierno de Mauricio Macri, la evolución del salario de los docentes universitarios fue menor a la de la inflación. Y el último año no es una excepción. Para enfrentar la pérdida de ingresos acumulada desde 2015, casi todos los cargos docentes precisarían hoy un aumento superior al 24 por ciento. Los datos provienen de un relevamiento del Centro de Estudios para el Desarrollo Nacional Atenea, elaborado para la Federación de Docentes de las Universidades (Fedun).
El estudio analiza la evolución del poder adquisitivo de los salarios de los docentes universitarios en relación con la inflación y con los acuerdos paritarios firmados por los sindicatos. En particular, detalla la caída del salario en términos nominales y porcentuales de todas las categorías docentes en función del acuerdo paritario 2018. “Con el gobierno de Mauricio Macri los docentes perdimos un nivel importante del poder adquisitivo”, señaló el secretario general de la Fedun, Daniel Ricci.
El informe muestra que la inflación entre junio de 2018 y junio de 2019 fue «una de las más altas desde la hiperinflación», representando un 48,5 por ciento según los datos del Indec. En tanto, en lo que va de 2019 la inflación suma 20,2 por ciento. En ese sentido, el estudio indica que con el Acuerdo Paritario 2018, a junio 2019 todas las categorías de los docentes universitarios perdieron considerablemente ante la inflación, siendo la categoría de ayudante de primera y la de jefe de trabajos prácticos las que más perdieron en términos porcentuales: precisarían aumentos del 28,7 y 22,8 por ciento, respectivamente, para recuperarse. Mientras que nominalmente el ayudante de primera y el profesor titular son las categorías que más perdieron: 22.460 y 21.817 pesos, respectivamente.
«Los que tiene peor situación son los ayudantes de primera ya que son cargos que recién ingresan en la carrera docente. Este es un factor que desalienta el ingreso a la carrera», señaló Ricci.
El informe destaca que el poder adquisitivo de los salarios de los docentes viene disminuyendo considerablemente desde 2015. “Todas las categorías perdieron poder adquisitivo desde que asumió Mauricio Macri, siendo ayudante de primera y jefe de trabajos prácticos las que más perdieron: 36,5 por ciento y 29,0 por ciento respectivamente”, resalta el informe.
Para la categoría de profesor titular, la pérdida del poder adquisitivo desde 2015, en términos nominales, fue de 74.963 pesos. Para un profesor asociado fue de 68.262 pesos; para un adjunto de 60.885 pesos; para un jefe de trabajos prácticos de 62.804 pesos; para un ayudante de primera de 69.485 pesos; y para un ayudante de segunda fue de 37.929 pesos. «En cuanto a montos, fueron las categorías de titular y ayudante de primera las que más perdieron en la gestión Cambiemos», destaca el relevamiento.
En conclusión, el informe señala que la mayoría de las categorías docentes precisan un aumento superior al 24 por ciento para nivelar su poder adquisitivo con la inflación. Excepto las categorías de jefe de trabajos prácticos y de ayudante de primera, que necesitan un aumento mayor al 29 y y el 36,5 por ciento, respectivamente.
Con respecto al acuerdo paritario 2018, ante la inflación registrada en los últimos doce meses, las categorías docentes deberían percibir un aumento superior al 16 por ciento para compensar la pérdida del poder adquisitivo.
«Gracias a lo que fue la lucha salarial que dimos y sobre todo lo que fue la última Marcha Nacional Universitaria, esa pérdida no llegó a ser tan alta como la del resto de los trabajadores en relación de dependencia», indicó Ricci y agregó: «En el 2016 y 2018 tuvimos una fuerte pérdida frente a la inflación. En 2017 y este año, conseguimos la cláusula gatillo y eso hace que recuperemos un poco aunque continuamos perdiendo». El ajuste salarial por inflación, de acuerdo con los previsto en el acuerdo paritario, debe activarse en septiembre próximo.
Página 12